¡Aún dicen que el pescado es caro!

   Esta semana hemos sufrido por estos lares un temporal de los buenos, todavía estamos ahora mismo tratando de arreglar alguno de los desperfectos que sufrimos, En todo caso, el peor ha sido el naufragio en Portosín del pesquero Divina del Mar, en el que tuvimos que lamentar la pérdida de la vida de uno de sus tripulantes, José Manuel Castelo Gudín, (Pichón):

   En cifras absolutas, viento, precipitaciones, salidas de los servicios de emergencias, sin duda el peor día fue el jueves, donde se superaron con creces las expectativas previstas, con vientos huracanados y olas de más de 10 metros.

   Sobre las cinco de la tarde, estando en casa monitoreando el tráfico marítimo, me encontré con lo que sigue, y me fui a verlo en directo:

   Una vez llegué a la entrada del puerto, observé con estupor que el mercante en cuestión, el "Ashley", aún con práctico a bordo, trazando ese extraño rumbo, no avanzaba ni retrocedía, torciendo la proa peligrosamente cerca del dique hasta que orzaba de nuevo, y cuando logró estabilizarse y se hizo de noche, enciende momentáneamente dos luces rojas encima del puente, (sin gobierno), cambiándolas a continuación a las mismas luces, pero de color blanco,

   Fue sobre esa hora cuando me decidí a molestar a dos de mis colaboradores, uno de ellos lo siguió desde el interior del puerto, a continuación el barco ancló y permaneció en esa posición hasta el día siguiente.

   El mismo día sobre las 13:44 horas, otro de mis colaboradores me alertó desde Sada, y me envió la siguiente fotografía en la que se ve un velero remolcado "in extremis" por una moto de agua, aunque me desplacé al lugar lo más rápido que pude, no llegué a tiempo de verlo, mi amigo Pedro, autor de la fotografía me comentó más tarde que el velero, por un fondeo insuficiente fue arrastrado por el viento y las olas, salvándose por los pelos:

   Sobre el título de esta entrada, ya lo habréis adivinado, es el de un cuadro de Sorolla que se exhibe en el Museo del Prado:

   En el mismo, después de la muerte de otro tripulante, un marinero gravemente herido recibe la atención de dos de sus compañeros, mientras de su cuello pende una medalla con la imagen de la "Virgen del Carmen", que debe ser sin duda quien les protege......

  Yo, sin duda, me atrevo a repetir las palabras que inspiraron a Sorolla......

   ¡Aún dicen que el pescado es caro!...